Entrevistamos en este inicio de curso escolar a Anabel Valera, especialista en educación. Arranca desde hace apenas unas semanas en el grupo sueco IEP y nos deja dos palabras –para referirse a los equipos directivos- que no dejará indiferentes a nadie: formación y humildad. ¿Cuántas veces se ha escuchado en muchos colegios, desde la dirección, –y en muchas empresas de otros sectores- que “esto siempre se ha hecho así”. Por ello Valera aboga por la humildad, como un valor necesario para saber pedir ayuda a la hora de tomar decisiones de cambio; y formación específica para enfilar el rumbo que lleve al éxito a la empresa.
De los colegios familiares a los pequeños grupos (en muchos casos, también familiares) de colegios; y ahora a grupos internacionales que compran colegios diseminados por el mundo. ¿Qué ventajas ofrece para el alumno estudiar en un colegio que pertenezca a la red educativa IEP?
La ventaja para los alumnos que estudian en los colegios IEP viene, fundamentalmente, del hecho de pertenecer a una red de colegios internacional que ponen el foco en la educación global. Esto supone una clara ventaja de cara a facilitar la movilidad a la que cada vez están más sujetas las familias.
Este grupo de colegios, pese a ser de diversa índole por su historia y lugar al que pertenecen, todos ellos comparten las mismas señas de identidad. Aun así, en IEP, ponemos un especial empeño en preservar la esencia de cada uno de los centros y fomentar el sentido de pertenencia, no solo al grupo, sino también al colegio y a la ciudad a la que éste pertenece.
¿Cuáles son las principales señas diferenciadoras del Grupo educativo IEP?
Todos los colegios IEP se distinguen por la educación internacional. No me refiero únicamente al aprendizaje del inglés como lengua vehicular principal, sino a la visión global, a la apertura de mente al mundo. Preparamos alumnos para un mundo cambiante, volátil, incierto y ambiguo y para ello ponemos nuestro foco en el fomento y entrenamiento de habilidades y valores como son la solidaridad, la integridad, la comunicación, la reflexión, la apertura de mente, la aprendibilidad o la creatividad.
Por otra parte, buscamos formar líderes, personas que sepan guiarse a sí mismas y ejercer una influencia positiva en los demás partiendo del ejemplo. Queremos que nuestros alumnos aprendan a escuchar, a ser facilitadores, a alentar y a promover un alto rendimiento en las personas que les rodean, pero siempre partiendo del trabajo personal.
¿Cuál será tu rol en IEP y cómo lo potenciarás gracias a tu experiencia en el sector?
Mi rol en IEP como Head of School Improvement será acompañar a los equipos pedagógicos de los colegios en su crecimiento integral y en el alineamiento con los valores y principios del grupo IEP.
Este acompañamiento supone pasar tiempo en los colegios, hablar y compartir con los equipos, co-crear planes estratégicos de desarrollo, hacer sesiones de formación y coaching pedagógico con observaciones de aula…
Todo un reto precioso que espero ayude a los colegios en su crecimiento y que impacte positivamente y de forma directa en beneficio de los alumnos, que son nuestro motor y principal razón de ser.
¿Líder o director de colegio? Hablemos de liderazgo positivo. ¿Cómo podría mejorar –en qué sentido- un colegio con un buen líder?
Hay excelentes directores de colegio que son líderes, que bajan al barro y arrastran con su ejemplo. Otras veces esos líderes no ocupan cargos directivos, a veces son profesores u otras personas del centro, y eso es estupendo, pero está claro que su impacto a nivel de centro es menor. El cargo no hace al líder, un director de colegio puede o no corresponderse con la figura del líder.
Así que el crecimiento de un colegio está ligado, indefectiblemente, a esta figura del líder, una persona que crea una visión y unos objetivos compartidos, que dibuja una trayectoria de trabajo y un camino a seguir y lo recorre dando ejemplo arrastrando con ella al equipo.
Además, un colegio con un director que ejerce un liderazgo positivo es un colegio que avanza, crece y fomenta sentimientos de pertenencia y contribución. Por ende, los índices de rotación de profesorado y bajas de familias son más bajos.
¿Por qué se otorga un peso importante a la experiencia curricular y académica de los profesores en el extranjero? ¿Qué se hace tan bien fuera y qué se hace tan bien en España?
La labor docente requiere de una formación rigurosa que, unida a la experiencia y a unos planes de evaluación de desempeño docente bien diseñados e implementados, tiene un altísimo impacto en los alumnos. Cuando esa formación y experiencia se complementa con estancias profesionales en el extranjero el aprendizaje es exponencial. Aprender confrontando tus conocimientos y formas de hacer con lo que se hace en otros países es muy enriquecedor a nivel cultural, la mente se abre.
Creo que el aprendizaje intercultural es maravilloso: fuera de España, sobre todo, en el norte de Europa y EEUU, trabajan muy bien a nivel competencial, la cultura de pensamiento, las softskills y la personalización del aprendizaje. En España estamos iniciando este camino.
Por otra parte, en nuestro país tenemos muy arraigada la cultura de acompañamiento, de acción tutorial, procuramos mantener cercanía con las familias… esto va muy ligado a nuestro carácter más mediterráneo.
En España tenemos grandes maestros, algunos más conocidos y reconocidos, otros cuyo trabajo no es tan visible pero que realizan una labor maravillosa llegando al corazón de muchos niños y niñas y acompañando a sus familias. Creo que tenemos mucho que enseñar, pero también mucho que aprender de otras culturas.
¿En qué sentido trabajan los colegios de IEP la morfología y mobiliario de las aulas de sus centros? ¿Se tiende a una homogeneización de los centros o se opta por mantener la esencia de cada Colegio?
En IEP estamos en el camino de ir adaptando nuestros espacios y mobiliario a una metodología más experiencial, competencial, que fomente el trabajo cooperativo y la creatividad, que permita la movilidad y permita un aprendizaje más autónomo. Partiendo de esta premisa que compartimos todos los centros IEP, cada colegio trata de adaptarse en función de su realidad particular, de su idiosincrasia.
¿Habrá un mismo proyecto educativo en todos los centros educativos gestionados por IEP?
Así es, pero como he comentado anteriormente, para IEP es muy importante preservar la esencia de nuestros colegios, tener en cuenta su historia, porque eso es lo que les da identidad.
Lo que queremos es potenciar lo positivo que tenga cada colegio y enriquecer sus proyectos educativos dándoles una estructura en línea con lo que demanda la escuela del siglo XXI.
¿Por qué resulta (cada vez más) crucial una profesionalización de los equipos directivos de los colegios?
Los retos a los que se enfrenta la escuela del s. XXI exigen una preparación y profesionalización rigurosa de los equipos directivos.
La bajada de la natalidad, el cambio de perfil de las familias, la preparación de unos alumnos para un futuro incierto e imprevisible, la nueva manera de entender el mundo laboral de las generaciones más jóvenes… son retos a los que los directores deben enfrentarse si quieren dirigir bien su nave.
Es primordial desaprender para aprender una nueva manera de hacer las cosas, como bien nos enseña Alvin Toffler. Ya no sirve el esquema vertical y autoritario, hemos de empezar a desterrar la famosa idea del “porque siempre se ha hecho así”, eso no ya no sirve. Y todo esto requiere de FORMACIÓN específica y mucha HUMILDAD para cambiar, pedir ayuda y trabajar en red.
¿Qué sinergias pueden fluir para un empleado (sea un profesor o un profesional del equipo directivo) en IEP?
Lo que buscamos en el equipo de IEP es que sus empleados se sientan parte de una gran familia, que se sientan acogidos, retados con nueva formación y la visualización de nuevos horizontes, que se sientan seguros.
Somos más de 500 personas las que formamos el grupo IEP y, entre todos, tratamos de ejercer una interdependencia positiva, sabedores que todos somos necesarios e importantes.
Creemos que el bienestar de los profesores y directivos tiene un impacto directo con lo que sucede en el aula, por ello, tratamos de cuidar a nuestros equipos.
